CANTARES DE MUJER
Un santo en los caminos de Cajamarca
“caminaba entre nubes, elevando oración
en sus manos ardía el amor…”
Entrando en las puertas del tiempo lo vimos caminando por caminos de fe y quebranto. ¿Qué decir de él, cuando ya se fue un 8 de abril de 1992 en la Lima gris, en Lima mar y arena movediza, en Lima de los provincianos? ¿Por qué hemos de recordar al Padrecito LUIS REBAZA NEIRA? No tengo la menor duda en afirmar porque se trata de un SANTO. Para hacer tal afirmación hurgo en la internet, buscando la definición de tal atributo: “ Santidad, un término que procede del vocablo latino sanctĭtas, es la característica de aquel que es santo. Este adjetivo (santo) puede hacer referencia al individuo bondadoso que no tiene culpa alguna. Al que es “puro”. Ser santo es ser sin “mancha, ni arruga ni cosa semejante” (Ef. 5:26-27). Y en 2 Co. 7:1 La idea radical de la palabra hebrea, religiosamente considerada, es la de separación y consagración: separación de lo que es común o inmundo; consagración a lo que es divino, sagrado, puro. La santidad es un atributo que Dios confiere a quien Él quiere, de acuerdo a su sabiduría y bondad. El Sagrado Corán hace mención de ciertos elegidos que están particularmente" cercanos" a Dios, los aulia o amigos de Dios.” Y desde cualquier ángulo religioso o de fe, es cabal para definir al Padre Luis Rebaza como un santo. Verdaderamente fue un elegido tanto por Dios en quién creemos, como por todos nosotros, pobres humanos de caídas hondas, de pecados graves en esta humanidad manclenca que nos hermana. Él se dio cuenta de nuestras limitaciones e igual que el Divino Hijo, se ofreció en humilde canto vital, por nosotros y sobre todo por los parroquianos y jóvenes estudiantes, donde fue asignado como sacerdote. En cada parroquia fue amado, no sólo por su carisma, sino por su trabajo de vida y virtud. Fue un hombre sin mancha, puro, íntegro y su mejor siembra fue dejar ejemplos a seguir y esa debiera ser nuestra tarea, nuestra ofrenda de gratitud. Las parroquias pueden ser semillero de educación, cultura, arte, servicio a los demás. Ahora que tanta falta hace ser recíprocos, solidarios, hermanarnos entre nosotros los humanos y también con esa naturaleza que pide a gritos nuestra acción. Desde dónde estemos, desde ese lugarcito inopinado, casi invisible, cuánto podemos resembrar y tener resultado como aquella plantita que se adhiere con alma y cuerpo a ese poquito de tierra en la vereda y, en ella crece, florece, se reproduce, aunque la baja policía lo echa a la basura, en ella sigue brotando con su amarilla o azul sustancia. Entonces seguirá viviendo el padrecito Lucho, alegrándose porque su ejemplo no fue arrastrado al olvido, o al saludo en los aniversarios de su nacimiento o muerte. Las Parroquias son fuente de unión, trabajo, celebración, cultura, cada uno de los que le damos gracias y tuvimos la suerte de estar con él, debemos tomar ese nuestro granito de arena y contarle que la semilla que el arrojó a las comunidades, ha fructificado, como la simiente, como la levadura se ha integrado para ser pan compartido de vida y de amor por el otro, como él quien dio su vida, sueños, recursos, para servir al que necesitaba de su mano caritativa o de su oración, elevándose hacia el Altísimo, apareciendo en un lugar o en otro, dando testimonio de ese amor que no es fácil dar. Amar de verdad es sacrificio, entrega, caridad, comprensión, creación, canto divino, para alegrar el corazón oprimido del hermano triste, sólo, sin trabajo, sin nadie que lo quiera, sin nadie que consuele su vejez o abandono.
PADRE LUIS REBAZA NEIRA, es usted un libro abierto a la vida, al amor, a la acción. Debemos seguir aprendiendo lo que este libro dice, interpretando aquellos sueños que quizás no pudo cumplir, o creando aquel objetivo que anhelaba, aquel sentimiento que quiere seguir prodigando. Está en nosotros interpretar lo que quiere de estas ovejas, que tantas veces balamos sin sentido justo. Siga siendo nuestro Pastor para poder andar el camino que nos trazó, de justicia, amor, equidad, creación heroica, por sus hermanos y hermanas de Cajamarca.
Cajamarca, 07 de abril 2022.