HA MUERTO JORGE PEREYRA
Jaime Abanto Padilla
Ha muerto Jorge Pereyra, un amigo por los libros, el periodismo y la intensidad de su palabra. Polémico hasta el fin. Hace unos días hablé con él por teléfono, en lo que fue la última conversación de nuestras vidas, se encontraba en Estados Unidos tratando de luchar con una enfermedad que finalmente lo venció. Su columna "A fuego lento" la que empezó a publicar hace unos años luego de dudar sobre el nombre y decidirlo finalmente debido a su pasión por la gastronomía que él denominaba "novoandina" iba a lanzarse en nuevo formato en el Diario ACTUALIDAD, otra vez nos ganó la muerte. Gracias por tu amistad Jorge y por esa mágica receta para calmar el cólico de Azulita aquella noche cuando ella tenía tres meses y viajábamos a Huamachuco. Queda pendiente el abrazo que ya no pudimos darnos. Descansa en paz amigo.
Comparto una entrevista que le hice cuando publicó su libro "Cuentos pichos cajachos".
"CUANDO ALGO ES BREVE, ES DOS VECES BUENO"
Dentro de su carrera literaria ¿Qué significa para usted Cuentos Pichos Cajachos?
Significa un desafío enorme, creo que es más fácil escribir una historia acudiendo al auxilio de innumerables palabras, pero cuando se decide condensar una historia en lo que los lingüistas llaman en su exageración el grado cero de la escritura. Donde se le quita todos los artificios, todos los añadidos, entonces se llega al esqueleto del relato. Cuando algo es breve es dos veces bueno, creo que en la brevedad está la esencia de la comunicación inmediata entre el escritor y el lector.
¿El significado de picho está conceptualizado como la cortedad?
Muchas veces cuando se usan una gran cantidad de palabras se pierde esa intimidad entre el lector y el escritor, entonces Cuentos Pichos Cajachos son cuentos pequeños, picho significa pequeño es una palabra quechua o pichuzo también, así se le dice a una persona de menor estatura. Cajachos es el diminutivo del gentilicio del cajamarquino. Son cuentos hechos con mucho amor, pensando siempre en nuestra tierra, en sus personajes, en historias que de alguna manera han sucedido o van a suceder en Cajamarca, porque las historias no solo se escriben cuando suceden, sino que uno puede escribir historias que están por venir.
Siempre nos enseñaron que el cuento más breve del mundo era el de Monterroso, el del dinosaurio: “Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí. Sin embargo tiene usted uno que es más breve”.
Yo conocí a Monterroso en México, hemos participado en diferentes tertulias, yo conocí a su esposa y fui invitado varias veces a su casa a cenar, a tomar café, en fin, a hablar de literatura, él era un hombre mayor que yo, naturalmente, pero con un conocimiento enciclopédico de la literatura, del cual yo aprendí mucho. Él también tenía una gran fascinación por la literatura peruana, de manera que yo me sentía como pez en el agua cuando estaba con él. De tal manera que es una especie de homenaje, incluyo dos cuentos que son todavía más pequeños que el cuento del dinosaurio.
¿Es un homenaje a Augusto Monterroso?
Es un homenaje a él, pero también los escritores tenemos que superarnos a nosotros mismos. Nosotros siempre tomamos como base a los que vinieron antes y los que vengan después nos van a tomar a nosotros como base, como pedestal para encumbrarse más adelante. Y así va a seguir la historia, llegará el día en que tengamos un cuento de una o dos palabras. Entonces ese es el trabajo de los escritores, superarse a sí mismos.
¿Qué tan complejo resulta elaborar un cuento corto con respecto a uno largo?
Tú como escritor sabes, y seguramente otros escritores que están leyendo esta entrevista, podrán dar testimonio de que para escribir siempre lo hacemos con la mayor cantidad de palabras y al mismo tiempo queremos volvernos demasiado ampulosos en el uso de palabras muy difíciles para impactar, creo que esa es la fase inicial de un escritor. Y ganamos en oscuridad más que en claridad por utilizar palabras excesivas que no vienen al caso. Creo más bien que el papel del escritor maduro es desembarazarse de estas palabras adicionales que no contribuyen a mejorar el texto, es preferible quitar aquello que es accesorio, que no es importante, aquello que le quita brillo al cuento.
¿Quiénes están financiando esta publicación?
Sale a luz gracias al generoso mecenazgo de la Universidad privada Antonio Guillermo Urrelo y de manera especial del presidente de su directorio, Manuel Becerra Vílchez, quien pese a tener diferencias ideológicas ambientales y mineras muy marcadas, sin embargo cultivamos una gran amistad, lo que demuestra que dos cajamarquinos en dos trincheras opuestas puedan colaborar en diferentes aspectos que tienen que ver con la cultura con la búsqueda de la identidada cajamarquina… entonces yo quiero saludar el apoyo del Fondo Editorial de la Universidad privada Antonio Guillermo Urrelo en el alumbramiento de este libro.
Hay mucha identidad en el libro
Creo que todos los escritores cajamarquinos y no solamente los escritores sino también los creadores y todos los artistas, tienen la enorme obligación de contribuir a robustecer la identidad cajamarquina, muy venida a menos en estos tiempos que nos ha tocado vivir, es necesario que a través de nuestros trabajos alumbremos el camino por el que están transitando o van a transitar las nuevas generaciones. No se ama lo que no se conoce y si no se conoce lo que es Cajamarca, entonces estas nuevas generaciones no van a amar a Cajamarca con el amor con que nosotros, los de esta generación y anteriores generaciones hemos amado a esta hermosa tierra. Más aun si vemos que nuestra ciudad ha sido poblada por gente de otras comarcas y por lo tanto se ha perdido el prototipo del cajamarquino.
Cajamarca, 21 de marzo 2022.