Presentación Mitos, cuentos...
Por: Lourdes BARRANTES DE VALERA
Fotos: Antonio RAMAL.
Es una danza muy singular, solamente la vemos para Navidad y año nuevo. Las
pastoras llevan un mensaje cristiano de amor y paz como la Navidad lo requiere,
con su baile y participación hacen apostolado por donde cantan y bailan a los
acordes de un rondín, una guitarra o una orquesta, últimamente un buen equipo de
sonido es suficiente.
Históricamente se remonta a la Colonia o principios de la República posiblemente, en esta época se inicia con mucha influencia hispana, esto lo podemos constatar por la música y el vestuario, considerando además que la devoción cristiana la trajeron los españoles.
Las pastoras hacen su presentación en casas de familias que han elaborado un lindo Nacimiento, también se presentan en la iglesia y en la Plaza de Armas. Con la presentación de las pastoras se hace la “levantada del Niño Dios” y su adoración, es todo un ritual típico y tradicional, antes de entrar a la sala o espacio donde harán su presentación, cantan canciones alusivas como pidiendo permiso, luego hacen su aparición cantando ,”Bailemos y cantemos con gusto y placer que otro regocijo no hemos de tener”, luego se acercan en parejas al Nacimiento delante del Niño Dios y van dejando sus presentes cantando una ofrenda cada pareja hasta llegar a última, enseguida se ubican adecuadamente en parejas como haciendo ronda y bailan la cuadrilla, que es un baile de salón a los acordes de un pasodoble muy español.
La cuadrilla es una danza que goza de una muy variada coreografía, con pasos que se realizan por parejas, como las pastoras todas son mujeres se tratan de diferenciar por el color del mantón, así unas hacen de hombres y otras de mujeres, dando a la rutina coreográfica un toque único en su género, la danza termina con un paso muy ágil llamado la “hecha” y la “deshecha “bailado a un ritmo muy acelerado, terminan su participación bailando una alegre marinera y una chiquita.
La pastora va ataviada de la siguiente manera: en la cabeza lleva una flor y caído hacia la espalda una hermosa sombrera de paja fina adornada con cintas multicolores, la blusa puede ser blanca o de color, un mantón de seda, a veces es un tapete o chal, de un solo color con flecos grandes ceñido por un extremo a la cintura en esta unión también colocan una flor, el anaco es una falda abierta atada por un extremo es de color negro, está decorada con cintas de seda graciosamente tejidas y unidas en forma proporcional de diferentes colores y grosores, usan zapatos negros , en la mano llevan una pandereta y su ofrenda que van a dejar al Niño Dios.
Lourdes Barrantes de Valera 14 / 02 /2014
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